Generación sin detalles

Mis tías han creado una tradición que pienso mantener y heredar a futuras generaciones, se trata de regalarse flores para atraer más flores.

Es simple, de mujer soltera difícilmente se reciben flores o chocolates sin razón y mucho menos para los momentos importantes, por ello, y siguiendo las leyes de la atracción, se dan flores para que en un futuro (ojalá cercano) lleguen flores de otras orillas.

Y es que parece que hacemos parte de una generación sin detalles y no es falta de plata (un ramo de flores en la calle vale máximo 5.000 pesos), es que a los hombres ya no se les ocurre regalar flores.

Hablando con mis amigas nos preguntamos que está mal, ¿les ponemos las cosas demasiado fáciles, que ya no se tienen que esforzar? O simplemente es que ya no se regalan flores, se dedican canciones, o se invita a un café.

Si bien es cierto que hay hombres detallistas (no puedo meter a todos en la misma bolsa), comienzo a pensar que cada vez son menos. De todas formas el tema es mucho más complejo, porque uno solo quiere recibir detalles de quien realmente le gusta. No faltará intenso que le regale un dulce diario y uno simplemente se niegue de raíz a que pase algo.

No hay nada simple en la vida… tienes y no tienes.